¿Cómo limpiar las mosquiteras plisadas?

Es normal que saber cómo limpiar las mosquiteras plisadas sea una de tus preocupaciones al comprarlas. Queremos mantenerlas bien, como el primer día, y que entre el aire sin problema. Y no solo eso, sino que podremos alargar su vida todo lo posible.

Te alegrará saber que no necesitas instrumentos o productos específicos. De hecho, es muy sencillo y rápido. Pero vamos a enseñarte cómo hacerlo exactamente para que todo vaya como la seda.

Limpiar mosquiteras plisadas desmontables

Si te has comprado una mosquitera plisada, no te preocupes porque es muy fácil. Es muy popular en los hogares porque puedes retirarlo con facilidad. Aprovechándonos de eso, lo que tendremos que hacerlo es encontrar un lugar donde poder ponerla y limpiar toda su suciedad.

Una vez tengas claro dónde vas a hacer este proceso, desmonta la mosquitera y colócalo ahí. Hazlo cuidadosamente y sin forzar nada, si no no podrás volver a montarla.

Coge una manguera y aprovéchate de su presión para poder retirar la suciedad que se acumula en la superficie. Además, te ayudará también a quitar cualquier insecto que haya podido verse atrapado.

Tras haber hecho esto, coge un cepillo con jabón para quitar todo resto de suciedad. Así podrás eliminar la suciedad más complicada. Una vez lo hayas hecho, pasa de nuevo la manguera para quitar los restos de jabón y ya estará lista.

Limpiar las fijas

Para poder limpiar mosquiteras plisadas fijas hay que seguir otros pasos. Al no poder desmontarlas, no vas a poder utilizar la manguera como en el otro caso.

Lo que tendrás que hacer es coger una esponja mojada en agua tibia. Pásala por encima para quitarle la suciedad acumulada. Repite este paso todas las veces que lo necesites hasta que elimines toda la suciedad de la mancha.

Una vez hecho esto, coge un paño seco y pásalo por la mosquitera para quitarle toda la humedad. Asegúrate de secarlo todo bien. Así garantizarás que tarde más en deteriorarse.

Cómo secarlas

Es crucial secarlas muy bien antes de volver a instalarlas. Este proceso se puede hacer de dos formas, pero asegúrate de hacerlas bien. Es esencial que no queden húmedas.

Lo más recomendable es un paño absorbente y suave. Así no dejarás pelusas al pasarlo. Lo habitual es utilizar trapos de microfibra, ya que absorbe una gran cantidad de agua y en pocas pasadas.

La otra opción es que, si hay altas temperaturas o un clima cálido, las dejes secar de forma natural. Esto podrá hacerse tanto con las desmontables como con las fijas, siempre que estas últimas estén en contacto con el sol. Así quedarán bien secas y en poco tiempo.

Recuerda que es muy importante que las mosquiteras estén limpias. Lograrán que haya un buen flujo de aire en el interior, que la habitación quede limpia y que el ambiente sea más agradable.

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